miércoles, 25 de julio de 2012

Empleados felices, ¿es posible?




La felicidad en el trabajo comienza por tener un empleo que se adecué a tu perfil. Este concepto pareciera estar muy lejos de la realidad laboral, pero debiera ser algo que se viva día a día para fomentar el bien común de las empresas, la competitividad entre empleados y lo más importante: la productividad.
Algunos de los factores que deterioran  el bienestar de los empleados son: la falta de motivación y evolución en su puesto, un sueldo bajo o el poco nivel de compañerismo.
En la otra cara de la moneda, si eres dueño de una empresa, una de las principales preocupaciones que debes  atender es el de tener una cultura corporativa que fomente un estado de ánimo positivo entre tus empleados. Porque tener empleados felices es una excelente base para mejorar la productividad.
Una persona feliz con su puesto de trabajo, será más eficiente en términos de productividad, ya que dará rienda suelta a su creatividad en pro de los objetivos de la empresa.
El estrés de las grandes ciudades, así como el dinamismo laboral que caracteriza a la sociedad actual, obliga a las empresas a encontrar fórmulas que contribuyan al mejoramiento del estado de ánimo de los empleados.
El psicólogo húngaro, Mihaly Csikszentmihali, tiene un concepto de un estado mental que experimentan los empleados de las empresas cuando se sienten a gusto con las labores que realizan. Csikszentmihali lo llamó “flujo” y tiene que ver con un encontrar un “sentido” a las labores que se realizan diariamente, es decir, sentirse “pleno” en la posición del engranaje empresarial del que se forma parte.
Este “sentido” puede tener sus bases en diferentes factores como por ejemplo la capacidad de influencia entre los compañeros, es decir, que tienen la libertad de tomar decisiones que ayudarán al equipo a dar mejores resultados.  
La autoconfianza es consecuencia de un sentido de pertenencia a la empresa y al equipo de trabajo, de “sentirse útiles”.
Otro de los factores que ayudan a determinar la “felicidad laboral” es el manejo del tiempo y la flexibilidad para atender asuntos de índole personal.
En estos tiempos donde la “insatisfacción en el trabajo” es cada vez más común y los ambientes laborales son cada vez más hostiles. Te damos las siguientes recomendaciones para ser y tener empleados felices:
- Escucha y atiende las diversas necesidades de cada empleado.
- Propicia la autoevaluación de cada uno de tus empleados, basándote en las diferencias de cada uno.
-  Delega y otorga poder de toma de decisiones. Esto fomentará el desarrollo del talento en tanto le da libertad al empleado de usar su creatividad en pro de los objetivos de la empresa.
- Garantiza la colaboración en equipo y la tolerancia entre los distintos intereses de los miembros.  
- Sé flexible en cuanto a los intereses individuales de cada empleado, esto a la larga fomentará que cada uno empate ésos intereses con los de la empresa.
- Promueve ambientes laborales dignos con los que el empleado se sienta protegido y comprendido.
- Vincula la productividad a objetivos medibles que añadan competitividad.
- Propicia la empatía a través de sesiones de retroalimentación.

Fuente: altonivel